27 de septiembre de 2010

De cantitos y guirnaldas!

"Seamos buenos entre nosotros", dice Pagani. "Cuidemosnón", dicen los avisos publicitarios de generación de conciencia menemista que hacía la olvidada por todos y recordada por naides ong sondrobe, esos que versaban "el tránsito lo hacemos entre todos". Otros tantos, lo que denominamos "la masa", sin demasiados miramientos, vociferan un "a coger que se acaba el mundo" y en la mayoría de los adolescentes que adolecen la adherencia a dicho enunciado es instantánea y contundente (o, como dice el diego: ROTUNDENTE. "La calle es ro-tun-den-te, fernando. Es así!").
A cuento de qué viene tanta cita? Ya te estoy contando. Hoy me levanté con ganas de putear, entonces se me hace imprescindible una introducción, porque sino me van a decir que putear es gratis y nada es gratis, señora, hace 25 minutos que estoy tipeando y me duelen las manos así que se me va bien rapidito a la puta que la pario, vieja de mierda! Porque claro, vos te leíste el parrafito de sorondanga ese en 34 segundos, pero yo recabé la info, o qué te crees? Que a Pagani lo cito de memoria? So loco vo! Es una arte de mucho sacrificio la de escribir pelotudeces, fijate vos. En fin, volvamos. Tengo ganas de putear y el blanco más fácil y más justo para toda puteada es el ente carente de mérito. En una rápida ojeada por el catálogo de no meritorios personajes de la metropolitana fauna nuestra, me crucé con el más mejor de los piores. El pelotudo que cumple años! Fenomenal, porque además de ser un pelotudo a todas luces, es un pelotudo bien genérico. A saber, cumplen años las mujeres, los negros, los putos, los gordos, las madres solteras, los judios, los ministros de economía, los panaderos, y así sigue la lista, o sea que si viene un gordo del inadi a decirme que soy misogino y discriminador lo puedo mandar bien a la mierda, que, a la sazón, es el objetivo principal del escrito este que estoy escribiendo, así que me ahorro un paso y me despacho: CHUPALA INADI, LA PUTA MADRE QUE TE PARIO! (igual, con Morgado todo bien, eh!)
Ah, qué relajo!
Sigamos.
El pelotudo este cumple años. La falta de mérito es absolutamente escandalosa. Uno resulta de un polvo que no se hecha, se pasa 9 meses haciendo la plancha (porque ni masticar, dejate de joder) y un buen día, lo jalan un poco de los pieses y santo remedio, hemos nacido. El festejo ni siquiera se hace propiedad excluyente de quienes nacieron en parto complicado, lo cual sería un ajusticiamiento, somero, pero ajusticiamiento al fin; Esos muchachos que nacieron acogotados con su propio cordón umbilical, luchando por la vida desde el comienzo de la vida misma, son un ejemplo de algo que merece festejarse. La torta de estos tipos debería ser inmensa, pues el mensaje en repostera caligrafía debería de versar algo como: "hace 42 años, rulo querido, luchabas por tu vida. Vida que habías conocido solo segundos antes. Y con inusitado valor a tan tierna edad, triunfaste! Por eso, sopla la velita haciendo gala de tu traquea no obstruida por cordel de ningún tipo y festejemos con este rico totín el gran tipo en el que te has convertido, rulo querido, 42 años después". Ahí sí! A ese cumpleaños invitame, no al de tu tía segunda, que tiene un embeleso con Seineldin y colecciona parafernalia Moussolinista! No me rompas las pelotas! Pero no, sociedad horripilante la nuestra, el rulo, que luchó tanto por su vida, tiene derecho a la misma fiestita de mierda que cualquier monigote que nació sin más mérito que haber sido otrora un polvo más o menos satisfactorio. No hay respeto. En cada cumpleaños deberían homenajearse, para felicitar a alguien que lo merezca, a los doctores, anestesistas y asistentes que sudaron el ojete como micos para que vos salieras de esa madriguera mugrienta y apestada de salmon rossé y salsa de cangrejo, por dios! Horror!
Tampoco soy nabo y no me ando creyendo que es tan fácil disuadir al festejante cumpleañeril, puesto que, siendo yo un "anti party", "anti felicitación", "anti tarjetita con dos perritos que son amigos para toda la vida", se me han cruzado por el camino pelotudos festejantes de toda calaña y, si algo aprendí, es que son diversas las formas que estos tipejos de sonrisa fácil y desafinado cantar pueden adquirir a la hora de mezclarse entre los normales. Como el post se me está viniendo largo, me voy a hacer cargo de uno solito: el pelotudo que, al advertir que no habrá festejo, exclama con un tono irritantemente parecido a Enrique Santos Discépolo: "Pero, che, los 28 se cumplen una sola vez en la vida, cómo no lo vas a festejar!?". A vos, mayúsculo soperutano, te digo que todos los años se cumplen una sola vez en la vida, con tu obvia excepción, que para llegar tan joven a ser tan pelotudo tenés que haber cumplido 4 o 5 veces cada año. Igual, un abrazo.

Si querés soplar, soplá!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

mi unico esfuerzo fue llegar primera entre tantos espermas, despues me quede tarnqui esperando.... Está mal planificar un no me muevo porque una cagada me puedo mandar!!!
Igual te regalo la torta!!! Cuando van a entender que no festejo cumpleaños de nadie, ni el mio, Mamá entendeee no hagas más la tortita desde los trece años le explico que no me gusta festejarlo y no me entiende, debo confensar que esta falta de oido de mi vieja genero en mi el sentir de cagarle el cumpleaños a cada persona y me encanta!!!!

Otra tontera para quejarme viendo el titulo, no es agua con gas es SODA!!!!! pero es shofferrr, se entiende, las cosas son como quiero que sean

nono dijo...

Anonimus amigus, nos vemos en el cumple de algún pariente lejano! Sospecho que lo vamos a pasar de rechupete!